Cuando
llega el invierno y las temperaturas descienden, suele ser común modificar
ciertos hábitos de descanso, alimentación y abrigo que, a la larga, pueden
afectar la salud. Entre las enfermedades más comunes del invierno se destacan
las respiratorias. Sin embargo, tener hábitos poco saludables también puede
repercutir negativamente en el peso y el ánimo de las personas.
A
continuación repasamos 5 claves para cuidar la salud durante el invierno:
1.
Higiene y ventilación: los contagios por virus suelen aumentar durante el
invierno porque pasamos más tiempo en lugares cerrados y mal ventilados. El
lavado frecuente de manos es la mejor forma de prevenir las enfermedades
respiratorias. Además, se recomienda ventilar los ambientes con asiduidad para
evitar la acumulación de polvo y ácaros que pueden favorecer la aparición de
alergias.
2.
Revisar la calefacción: el invierno es la estación del año en la que sucede la
mayor cantidad de accidentes domésticos relacionados con la calefacción. Por
eso es necesario agudizar los cuidados para evitar riesgos de intoxicación por
monóxido de carbono o incendios. Se recomienda evitar la instalación de
calefones en los baños, hacer revisar las salidas de gas de calefones y estufas
por un gasista matriculado y garantizar la ventilación de los ambientes.
3.
Alimentación balanceada: durante el invierno el organismo requiere de una mayor
cantidad de calorías para afrontar el frío y es fácil recaer en alimentos muy
calóricos como los guisos. Sin embargo, es importante no dejar de incluir
vegetales en la dieta a través de platos calientes como sopas, tartas, purés o
tortillas.
4.
Estado de ánimo: en esta época del año, la falta de exposición al sol puede
afectar el estado de ánimo de algunas personas provocando una sensación de tristeza
o incluso estrés. Para contrarrestar este malestar es importante mantener una
actitud mental positiva, descansar al menos 8 horas al día y no dejar de
ejercitarse.
5.
Actividad Física: el ejercicio es una gran manera de ayudar al cuerpo a entrar
en calor, mejorar el estado físico y levantar el ánimo durante el invierno. Al
realizarlo, se recomienda usar ropa térmica y realizar una rutina de
precalentamiento extensa para evitar lesiones.